La selección de Uruguay lé dio una lección de fútbol a los anfitriones sudafricanos y con un lapidario 3-0 obtuvo medio boleto para alcanzar los octavos de final de Sudáfrica 2010. Los goles, que fueron obra de Diego Forlán y Álvaro Pereira, dan a los charrúas su primera victoria en una Copa del Mundo, desde Italia ’90, hace veinte años.
El partido fue ampliamente controlado por los uruguayos que demostró todo el potencial sudamericano que poseen, mostrando más oficio negándole la pelota y también las ocasiones de gol a Sudáfrica. A diferencia de México, Uruguay si supo aprovechar los errores de los africanos, y sus jugadores siempre mantuvieron el orden, dirigidos a la perfección desde la banca por Oscar Washington Tabárez.
Tabárez envió a sus tres delanteros, Forlán, Suárez y Cavani, a presionar la salida de la pelota de los sudafricanos, que optaban por tirarla a lo que saliera con pelotazos largos y al bulto.
Forlán, al 24’ abrió el marcador con un tiro desde fuera del área que rozo en Mokoena, y pasó por encima del portero a centímetros del horizontal. En tierra de nadie, el delantero del Atlético de Madrid hizo un caracoleó y de pierna derecha saco el cañonazo que a simple vista parecía un autentico golazo.
Mphela al filo del descanso tuvo una oportunidad, tras conseguir cabecear un centro de Modise, que se perdió muy cerca del palo de Muslera, que fue muy poco exigido durante los noventa minutos.
Al empezar el segundo tiempo Sudáfrica salió revitalizada esperando lograr el repunte de juego que consiguieron contra México, sin embargo a su juego le faltó pausa, y nunca encontró como hacerle daño a la defensa charrúa comandada por Lugano y Godín, muy sólida todo el partido, tal y como lo había estado en su debut frente a Francia.
Uruguay mantuvo un orden casi militar atrás y Tabárez dio libertad absoluta a sus hombres más adelantados, que salían a la contra, cambiaban arbitrariamente de posición y veían cada vez más cerca las opciones de gol frente a la meta de los “Bafana Bafana”.
Pudo haber sido Suárez, que tuvo un par de ocasiones; o incluso Cavani, discreto toda la noche pero que también tuvo las suyas, sin embargo quien volvió a marcar fue Forlán, de penal al 79’ y tras la expulsión del meta Khune, castigada su falta con roja directa.
Con un hombre más y dos goles arriba, Uruguay sólo tuvo que dejar pasar los minutos y esperar hasta que cayó el tercero, obra de Pereira a pase de Suárez, al quinto minuto re reposición.
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